El comandante general del Ejército, general de brigada Henry Delgado, se trasladó a la provincia de Orellana, donde supervisó personalmente las operaciones militares en la zona tras la emboscada ocurrida en Alto Punino, que dejó un saldo de once valientes soldados ecuatorianos caídos.
El Grab. Henry Delgado destacó que esta acción tiene como objetivo revisar y supervisar la planificación de las operaciones militares en curso, las cuales se están llevando a cabo con una nueva reapreciación de la situación.
“El traslado de mi puesto de mando ha sido para revisar y supervisar la planificación, las operaciones técnicas y tácticas, y los procedimientos que estamos realizando.
La finalidad es determinar la ubicación de estos grupos, y ejecutar una operación militar efectiva en el ámbito interno”, expresó el comandante general. Con la consigna de neutralizar a los responsables de esta emboscada, el Ejército Ecuatoriano ha desplegado un total de 1800 efectivos militares en la jurisdicción de la frontera norte, fortaleciendo las operaciones de seguridad y reforzando el control en la zona.
Además, se han implementado operaciones aerotransportadas hacia los puntos identificados como de interés estratégico, con el objetivo de ubicar y desarticular a los grupos armados ilegales que amenazan la paz y soberanía del país.