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Cuatro policías sentenciados en el caso Metástasis admitieron su participación en delitos que favorecieron a la red criminal liderada por Leandro Norero, el narcotraficante y financista de bandas criminales asesinado en octubre de 2022.
Desde sus posiciones dentro de la Policía Nacional, gestionaron acciones que beneficiaron judicialmente al narcotraficante y les reportaron ganancias económicas. Este caso marca la primera vez que el país ha podido conocer los rostros y escuchar los testimonios directos de uniformados involucrados en actividades criminales.
Entre los sentenciados se encuentra el teniente coronel Neycer Mazón Sinmaleza, quien era jefe de distrito de la Policía en Samborondón. Mazón confesó haber puesto a agentes de su jurisdicción al servicio del crimen organizado. Admitió haber filtrado información confidencial y brindar seguridad a las propiedades de Norero. A cambio, recibió diez mil dólares y otras dádivas destinadas supuestamente al mantenimiento de patrulleros y motos, aunque reconoció que estos recursos nunca fueron utilizados para tales fines.
El cabo segundo Gabriel Genaro García, alias Doble Rueda, trabajaba en la Dirección Nacional Antidrogas y también colaboraba con la organización narcodelictiva Los Choneros, liderada por Norero. Utilizando sus conocimientos informáticos, bloqueó la extracción de información del teléfono de Norero y robó un equipo policial para cumplir con las demandas de la organización. Durante su confesión, García expresó su arrepentimiento, declarando: “Hurté el token de la Policía Nacional que tenía a mi cargo para facilitar el beneficio de la impunidad que buscaba la organización”.
El sargento Héctor Paredes y el cabo primero Cristian Chauca, ambos agentes de la Unidad de Lavado de Activos, también admitieron su complicidad. Los informes investigativos que debían presentar a la Fiscalía pasaban primero por las manos de Norero. Paredes confesó: “Entregué a la organización criminal un borrador del informe con los avances investigativos. Por mi colaboración recibí nueve mil dólares”. Por su parte, Chauca agregó: “Accedí a filtrar información”.
Los cuatro policías ofrecieron disculpas públicas como parte de la sentencia de 40 meses de cárcel. Además, deberán devolver los recursos económicos obtenidos ilícitamente de la organización criminal. Este caso evidencia la infiltración del crimen organizado en instituciones clave y el impacto de estas acciones en la lucha contra el narcotráfico.