La comunidad de La Concordia se encuentra preocupada, ya que la construcción de la Unidad de Vigilancia Comunitaria en el cantón permanece abandonada desde hace casi un año.
Según información proporcionada a nuestro medio, la obra —cuyo objetivo era fortalecer la infraestructura de seguridad en la zona— está inconclusa y sin avances visibles desde mediados del año pasado.
A esta situación se suma la falta de operatividad en el parque automotor de la Policía Nacional. Actualmente, los patrulleros no cuentan con combustible ni mantenimiento, lo que impide su uso en operativos de control y patrullaje. Incluso, dos camionetas nuevas permanecen estacionadas sin poder ser utilizadas por las mismas razones.
Las motocicletas asignadas a la unidad tampoco reciben el mantenimiento necesario, reduciendo aún más la capacidad de respuesta de los uniformados ante emergencias o denuncias ciudadanas.
Habitantes de La Concordia han expresado su preocupación ante estas limitaciones que afectan directamente a la seguridad del cantón. En ese contexto, hacen un llamado urgente a las autoridades competentes para que se reactive la construcción de la Unidad de Vigilancia Comunitaria y se asignen los recursos necesarios que permitan poner en funcionamiento los vehículos policiales.